TALLERES Y PROYECTOS EDUCATIVOS ECOESCUELA CIENTÍFICO AMBIENTAL

CIENCIA, ARTE Y TECNOLOGÍA

Los Talleres y Proyectos Educativos de la EcoEscuela Científico Ambiental, están diseñados para “poner manos a la obra” o, en otras palabras, Aprender Haciendo.

Su objetivo es explorar en el autoconocimiento de nuestras propias habilidades e inclinaciones, en el contexto de aprender, experimentar, y poner en práctica técnicas desarrolladas para resolver problemas específicos, como también inclinaciones y gustos personales que tienen relación con la triada Ciencia-Arte-Tecnología. En conjunto, o en pares, Ciencia-Arte; Ciencia-Tecnología; Arte-Tecnología; o individualmente, Ciencia, Arte, y Tecnología.

Si bien todas ellas se pueden combinar de múltiples maneras, también pueden manifestarse y explorarse de manera independiente, aunque, como ya hemos visto, es difícil no encontrar relaciones entre ellas que les den un sentido más amplio, o que enriquezcan su descubrimiento, exploración y desarrollo.

Cualquiera que ha aprendido algún oficio, por aparentemente simple que parezca, sabe que éste se construye sobre ciertos principios y materiales propios del oficio en cuestión. Así, los oficios de carpintero, constructor o reparador de botes, o el de pescador artesanal, al poco andar pueden ser considerados y reconocidos como verdaderos artes. Lo mismo que el oficio de un zapatero, de un pintor de casas, o de un electricista. No serán artes plásticas, musicales o escénicas propiamente dichos, pero cada uno de los actos que ellos involucran, representan manifestaciones únicas e irrepetibles de un conocimiento adquirido, que tienen impacto en el entorno.

Cada una de estas disciplinas, posee una o varias técnicas y materiales específicos. Cada uno de estos materiales requiere un tratamiento especial, una determinada preparación, y no da lo mismo usar un tipo de material u otro, o usarlo de una determinada manera o de cualquier otra, sobre todo cuando alguno de éstos no cumple con los requisitos que la técnica indica; o si se usan de la manera inapropiada.

En cada técnica, hay ciencia involucrada, leyes físicas, matemáticas, químicas, y propiedades de los materiales que posibilitan el adecuado desempeño de éstos y, a fin de cuentas, la ejecución con propiedad del oficio al que pertenecen.

Parafraseando a un estudiante, que me contaron una vez llegó a la siguiente reflexión, extendiendo el sentido de una frase conocida: “La práctica hace al maestro… y luego el maestro perfecciona la práctica”. En otras palabras, nunca terminamos de aprender, de perfeccionarnos, de conocer, conocernos, y explorar nuevos horizontes y regiones desconocidas que se abren con nuestra práctica y experiencia.

La práctica prolongada y el conocimiento adquirido, hacen de cualquier persona, un maestro en su área. Y con las herramientas aprendidas, es posible explorar nuevos territorios, descubrir nuevas relaciones, plantear nuevas necesidades, e inventar nuevas soluciones. ¿Acaso no es así como los seres humanos hemos explorado y perfeccionado nuestra condición de habitantes de este planeta, hasta el punto en que nos encontramos hoy en día?

Poner “manos a la obra” implica desafiar al cerebro y al sistema nervioso a encontrase con el error, con la equivocación. Con la frustración o el desánimo que esto puede llegar provocar, pero también con la alegría de haber aprendido algo muy importante: haber aprendido como no hay que hacer las cosas. Aprender cuáles son los caminos que se deben evitar, para no perderse en la ruta y así, llegar a buen puerto.

Muchas veces, este tipo de aprendizaje resulta mucho más valioso que el que se da cuando tenemos éxito inmediato en alguna empresa. Sobre todo cuando consideremos la muy conocida frase de “suerte de principiante”.

Por otra parte, es también posible que, evitando las maneras incorrectas de proceder, se llegue finalmente a la manera correcta de hacer, por descarte, por indagación, a través de la prueba y el error.

De esta forma, el aprendizaje termina siendo enriquecido con la experiencia del error y la corrección. Y tan fundamental como esto, este tipo de aprendizaje, muchas veces evitado o incluso desdeñado, nos enseña a cómo enseñar. No evitando los errores, o temiendo equivocarnos, sino enfrentándose a ellos. El miedo nos paraliza, mientras que la audacia nos moviliza a encontrarnos con lo que sea. El conocimiento adquirido nos guía por sí mismo. Y, como decía un viejo adagio que tenían los antiguos romanos: “la (diosa) fortuna favorece a los que se arriesgan”.

Con este marco introductorio, la EcoEscuela Científico Ambiental, ofrece la realización de una parrilla de Proyectos y Talleres Educativos que persiguen estos objetivos. El número de talleres y proyectos propuestos no es exhaustivo, sino que es una propuesta inicial que pretende ampliarse de acuerdo a los propios intereses de la/os estudiantes, guiados en su camino de exploración y conocimiento por el equipo de Tutores, Talleristas, y Educadores Ambientales de la EcoEscuela Científico Ambiental.

Proyectos y Talleres propuestos para el año 2024:

  • Taller de Fotografía
  • Taller de Comunicación y Producción Audiovisual
  • Proyecto Cómics, Narración Gráfica y Novela Gráfica
  • Taller de Teatro
  • Taller de Creación Literaria
  • Taller de Producción Cinematográfica Experimental
  • Taller de Cocina
  • Taller de Huerto Orgánico
  • Taller de Carpintería
  • Taller de Acuarela y pintura al Pastel
  • Proyecto Ciencias de la Computación
  • Taller de Caligrafía china experimental
  • Taller de Tejido a Crochet
  • Taller de Repostería
  • Taller de Expresión Musical
  • Taller de Yoga y Meditación
  • Proyecto Radio-Teatro